Hoy, en Facebook,
Sapoconcho Galego me pidió opinión sobre este vídeo:
En muchas cosas de las que el "artista" dice estoy de acuerdo, coincido. Pero no en otras. No creo en el arte conceptual, para empezar, ni creo que todos somos artistas en potencia, pero me encanta, por ejemplo, eso de "los artistas me la refanfinflan". A mí también. Sigo coincidiendo con muchas cosas: me parece que tiene razón cuando insinúa que el "arte" en lo efímero, lo conceptual, está sólo en cómo se narra (literatura), al menos lo reconoce en parte. Coincido en la denuncia de lo oficial, lo mercantil... pero el camino que
Isidoro Valcárcel ha elegido para llevar a cabo su protesta me parece trillado, inútil y sobre todo engañoso. Engañoso para sí mismo en primer lugar y para todos los demás en segundo lugar.
Al menos, como conceptual-creyente parece sincero. Su inicio en el arte fue en una época reivindicativa, en la que los gestos eran muy visibles, y la gente creía sinceramente que los gestos cambiarían el mundo. Hoy en día, en una época en la que el cinismo está tan bien considerado, eso, el ser sincero, hace a este hombre muy, muy respetable. Pero no comparto ni sus gustos ni sus conclusiones, aunque sí su análisis en gran medida. Opino que se ha equivocado, que ha pecado quizá de cándido, como tantos espíritus combativos que se han perdido por el camino.
En resumen, creo que para ser críticos dentro del arte o como artistas frente a la sociedad la
inacción (no hacer arte, sino quedarse en el concepto) es inútil. Lo radical, lo efectivo y que puede traer algo de esperanza de que las cosas cambien es ACTUAR. Es decir, HACER arte, desempolvar los pinceles, los cinceles o lo que sea. Pensar, proyectar, idear pero sin HACER luego NADA no ha llevado más que a una crisis sin precedentes y un descrédito total de nuestro mundillo. ¿Que alguien, en lugar de pintar o esculpir quiere hacer teatro, o literatura? ¿Que has estudiado arte pero ves que lo tuyo es la literatura? Pues adelante, pero HAZ ALGO. Porque siempre HACER será más válido y útil que NO HACER, que quedarse pensando mirando a las Batuecas y
autoconvencido de que la NADA demuestra ALGO.