jueves, 27 de agosto de 2009

¡Rápido! ¡Solución de Ford Mondeo azul!

Desde Lérias Várias vengo sosteniendo, al igual que otros blogueros hartistas, stuckistas o no pertenecientes a estos movimientos, que el arte conceptual es una de las engañifas institucionalizadas.

Alguna gente, al enfrentarse por primera vez a la duda sobre la validez del conceptualismo como arte, se extraña. "Si tan falso es cómo van a apoyarlo los poderes", se preguntan. Les parece que este escepticismo con respecto a la esencia misma de lo que se suele denominar en exclusiva como arte contemporáneo suena demasiado a conspiranoia. Pero no es preciso recurrir a los Illuminati o a intereses oscuros. La estulticia conjugada con la pereza permite que florezcan los engaños: el caso del pseudoarte es hasta inocuo comparado con las consecuencias aterradoras de la promoción de las pseudociencias. Quizá el engaño colectivo más afianzado en la oficialidad, y el que actualmente podría llegar a ser más peligroso es el auge imparable de la Homeopatía. Una pseudociencia sin más, pero que goza de un inexplicable prestigio. Afortunadamente, como en el caso del pseudoarte, el humor tiene la sorprendente capacidad de quitar instantáneamente la careta a los engaños. Este es el vídeo que hoy cuelga de Escolar.net:



Pero si queréis pruebas científicas, aquí esta joya (son cinco partes) de la televisión (Horizon/Nature):



23 comentarios:

Carlos Sánchez Gutiérrez dijo...

¡Magnífico, Anxo! ¡Nunca se me había ocurrido hacer la comparación entre Homeopatía y Arte Conceptual, pero es perfecta!

La escena final del sketch inglés, con las cervezas homeopáticas, me recuerda a algo que hice una vez:
Tuve una discusión en la que un amigo defendía a capa y espada al arte conceptual. No llegamos a nada, claro, como suele suceder en estas discusiones, pero el caso es que mi amigo me invitó a cenar a su casa la noche siguiente, y yo quedé de llevar el postre. En lugar de un pastel, o un flan, le llevé una receta para hacer rosca de reyes (esto fue en enero), escrita con mucho cuidado en una cartulina muy fina y en un lenguaje muy florido, y le dije que mi rosca era...un postre conceptual. Sobra decir que nos quedamos todos con ganas de algo dulce al término de la cena...
¡Pero desde entonces mi amigo es un converso anti-conceptualista!

Saludos,

Nacho G. dijo...

Todo el arte conceptual es una engañifa? Y toda la música tecno también? Y toda la cocina turca? Y ese amigo del último en intervenir, "defendía a capa y espada" TODO el arte conceptual? Y el postre imaginario ese le convirtió en anti-conceptualista y ya NADA de lo que le gustaba antes le volvió a gustar? Qué mundo más fácil vivís, de blanco o negro. ¿O es que los que están haciendo una parodia de verdad sobre el extremismo sois vosotros? En ese caso felicidades.

Anxo Varela dijo...

Hola, Nacho. Verás, cuando se habla de creer o no en la homeopatía, el conceptualismo, etc, hay que considerar sus principios. Si crees, pues, que una enfermedad se cura con una sustancia que provoca los mismos síntomas que la dolencia y cuya dilución es mayor que lo que supondría una gota en todos los océanos del planeta Tierra, entonces aceptas la Homeopatía, entera. Y si crees que esos principios son absurdos, la rechazas también entera. Resulta absurdo aceptar PARTE de la Homeopatía. Porque TODA la Homeopatía se basa en esos dos principios.

El arte conceptual se basa, TODO, en que la idea es más importante que la forma, y que, así pues, el simple designio de un objeto por alguien que se considere artista hace que el objeto se convierta en arte. Es decir, es lo que Danto llama transfiguración del lugar común, y que en esencia supone creer en una especie de transustanciación, como la que supone el rito cristiano de la Eucaristía.

En algo así se cree o no se cree, por lo que se acepta TODO el arte conceptual o ninguno. Francamente no me imagino la manera de poder creer en la transfiguración/transustanciación "a veces". Resultaría absurdo, arbitrario.

De la música tecno o de la cocina turca nadie ha hablado que yo sepa, pero ninguna de ellas se basa en principios sobrenaturales o que supongan creencia alguna. Básicamente música tecno es un género o tipo de música, como las demás, y la cocina turca la cocina de una región en concreto. No se "cree" o "no cree" en ellas, sino que pueden agradar más o menos. Aunque también la homeopatía y el arte conceptual pueden agradar más o menos, sí se basan en unas creencias determinadas que, por ahora, no son legalmente obligatorias para todo el mundo.

Aunque no me extrañaría mucho que en un futuro se imponga tal obligación de creer so pena de multa o cárcel.

Nacho G. dijo...

Primero de todo: yo no he dicho nada de la homeopatía, no me interesan esos rollos. Por eso me parece un poco facilón decir "el arte conceptual es un fraude como la homeopatía" y cuando te responden "puede que no todo el arte conceptual sea un fraude", salir con una explicación de cómo funciona el engaño de la homeopatía. No se puede hablar del arte sin hablar de la homeopatía? Es que yo no veo la relación, no comparto que funcionen de la misma manera. Vuelves a verlo muy fácil cuando dices que "el arte conceptual se basa, TODO, en que la idea es más importante que la forma" TODO? Estás seguro? Piénsalo dos veces. Sigues estando seguro? Y si fuese cierto, cuál es el problema? Por ejemplo, lo que define la literatura te parece fácil de precisar? Porqué si yo escribo un poema no es literatura y si lo publica José Hierro sí lo es? y por qué si yo dibujo un retrato de mi madre no es arte y si lo hace Antonio López sí lo es?

Carlos Sánchez Gutiérrez dijo...

Hombre, Nacho, relájate, que una pequeña anécdota como la que he contado aquí no va a causar la debacle de TODO el arte conceptual...

Pero si me preguntas si considero a TODO el arte conceptual como una engañifa, te respondo que sí. Una engañifa igual que lo son la homeopatía o las religiones (todas). No tienes que concordar conmigo, como no lo hacen tampoco los del Opus, seguramente, pero bueno, qué aburrido sería todo si estuviésemos de acuerdo siempre...

Nacho G. dijo...

los del Opus??? el Opus funciona también como el arte conceptual? Y con respecto a tu gran tolerancia con TODOS los que se dedican al arte conceptual... pues poco más que decir, tú mismo les dices sin ningún rubor que TODOS hacen engañifas. TODOS. Es que me alucina.

Anxo Varela dijo...

Lo siento, Nacho, pero estoy totalmente con Carlos. El conceptualismo es una FE que yo no profeso.

Por otra parte me pueden encantar las obleas, por su sabor, textura, etcétera, y aún así no creer que al comer una forma sagrada en la iglesia como la carne de Cristo. ¿Entiendes la diferencia entre gusto y fe?

Y respecto a lo último... pues sí, tus poemas son arte, como los de José Hierro. Otra cosa es que sean parte del gran arte, el que ha llegado a lo que Gombrich define como "excelencia artística", o una basura. Eso dependerá, creo yo, de tu talento y tu oficio.

Nacho G. dijo...

Definitivamente no sé si os dáis cuenta de el nivel de extremismo al que sois capaces de llegar. Para vosotros TODO el arte conceptual es una engañifa, absolutamente todo. No se salva ninguno de los miles de artistas que lo practican en el mundo. Vosotros decidisteis que es una fe, que no la profesáis y que no hay nada más que decir porque la discusión no pertenece al mundo del arte, sino al de la religión o algo así. Qué fácil. Pues sí que habéis encontrado una manera de cargaros de un plumazo el problema y el debate! "Decimos que no es arte" y ya está. Hay miles de artistas, miles de museos que les exponen, miles de críticos que hablan de ello. Pero no. Todo es una engañifa. Lo que pasa es que LA GENTE NO SE DA CUENTA. Les dan gato por liebre, pobrecitos. Pues nada, cada uno con su fantasía conspirativa.

Anxo Varela dijo...

Buf, Nacho, te estás poniendo "un pelín" alterado. Que uno crea que el llamado "arte" conceptual no sea arte no significa que todos los que se arriman a ese negocio sean todos unos timadores y todos en la misma medida. De todo tiene que haber en la viña del Señor. Un ejemplo: ¿Son todos los curas pederastas? NO. ¿Son todos los curas unos timadores? No, al menos conscientemente no todos engañan a sus feligreses. Pero independientemente de las actitudes honestas o deshonestas de cada cura, cada homeópata o cada conceptualista en concreto, a mí también me parece que el catolicismo, la homeopatía o el conceptualismo son los tres unas organizadísimas engañifas legitimizadas por el sistema. Si bien, la religión lleva tanto tiempo entre nosotros que su dimensión social es inmensa, y suelo respetar esas creencias, para convivir. Incluso aunque los creyentes no respeten -también en el caso de filohomeópatas y filoconceptualistas- mi no-creencia.

Por lo visto los creyentes no soportan que otros no crean. La Inquisición, los Jemeres Rojos, los Talibanes, son ejemplos bien ilustrativos. No recuerdo casos de hordas de escépticos asesinando fanáticos.

Anxo Varela dijo...

Di que sí, hombre. Por analogía, supongo que los cientos de miles de homeópatas que ejercen en el mundo, y el apoyo que hospitales, médicos, profesores universitarios, hasta gobiernos -e incluso la OMS recientemente- le prestan hace que la Homeopatía -mucho más extendida que el Conceptualismo- sea verdad. Pues bueno, pues vale, pues muy bien. Muy buen argumento, vive Dios ¿Será sólo a mí que la que me parece fácil es tu postura?

Nacho G. dijo...

Alterado no, estoy tranquilísimo, aunque como veo que realmente de lo que te gusta hablar es de la homeopatía y de los curas no te molestaré más. A ver si encuentro un sitio donde hablen de ARTE (ya me da igual de qué clase). Saludos a ti y al pastelero imaginario.

Anxo Varela dijo...

Gracias por tus comentarios, no hacen más que reforzar la argumentación que he dado en mi entrada sobre las creencias; aunque no te hayas percatado, esta entrada no habla de ARTE sino sobre CREENCIAS, entre ellas Homeopatía y Conceptualismo.

Carlos Sánchez Gutiérrez dijo...

"El Pastelero Imaginario": Maravilloso título para una obra conceptual, sin duda. Al César lo que es del César, por lo que he de decir que, definitivamente, tienes futuro, Nacho.

Mira, Nacho, una cosa que creo que no estás entendiendo es que, para elaborar un argumento (en este caso un argumento en contra del arte conceptual), es necesario adoptar una postura firme y que no se preste a ambigüedades. Ello no significa que Anxo o yo seamos en la práctica los talibanes del arte, o los paladines del anti-conceptualismo. Anxo presentó un símil muy divertido y acertado, y yo lo quise corroborar con mi anécdota pastelero-imaginaria. Luego hemos insistido en la postura inequívoca de nuestras ideas, pero te aseguro que no tenemos ningún interés en apostarnos en algún edificio para, desde allí, acribillar conceptualistas a escopetazos.
Y si, en este blog de Anxo se habla a menudo de arte. Arte de todo tipo. No siempre dedica Anxo su tiempo a criticar al conceptualismo. Evidentmente, en este caso, te has sentido aludido, y estás en tu derecho, pero te pido que no descalifiques a TODO un blog en función de una sola entrada. ¿Quién pedía que no se descalifique al todo por las partes, a ver?
Lo digo de nuevo: ¡Relájate, hombre!
O mejor aun: escribe un poema al respecto y publícalo aquí. Eso sí que sería darnos una cachetada con guante blanco.

Juanma Moreno dijo...

Buenas Nacho. Sin duda se nota que te ha consternado que exista un resquicio de disidencia con lo que se nos presenta como arte.

Lo que algunos queremos reivindicar es el juicio. Me explico. El arte conceptual es por definición algo que no admite crítica ni disidencia. Si todo vale, todo vale. Si está en una peana, es arte; si está en ARCO, es arte, y no hay otro criterio. Es lo que, como decían por ahí argumentaban Danto o Dickie (infumables ambos, por cierto) en sus teorías institucionales del arte.

No obstante lo que yo creo es que hay que ir más allá del criterio del comisario que decide qué exponer. Hay que tratar cada obra de forma crítica. Y creo que hay que ser exigentes con lo que uno ve, del mismo modo que lo soy con lo que yo hago. Hay que buscar la calidad, lo que a uno realmente le haga SENTIR. Yo he visto muchos museos, pinacotecas, galerías, centros de arte contemporáneo, etc.. y NUNCA he sentido nada ante una obra de arte conceptual (y no hablo de exposiciones de artistas irrelevantes, si no de los mismísimos Fluxus o Beuys), no obstante he salido emocionado, casi levitando, tras ver a Menzel en Berlín, por ejemplo.

Tras consecutivos desengaños, tras salir de salas con la sensación de haber sido timado con el precio de la entrada, uno acaba por volverse escéptico.

Por cierto, me hace gracia que acuses al personal de extremismo, ya que el propio conceptual se fundamenta en el argumento extremista de rechazar y tratar de superfluo en bloque a todo el arte basado en la representación.

Negar la negación es hablar en términos positivos.

Saludos

mariano dijo...

Hola.
Nacho, no todo el arte conceptual es un engaño, porque hay gente a la que no logran engañar, por ejemplo a mí. En realidad, no logra engañar a nadie, sólo hacer callar a una mayoría que no dice lo que piensa, pero lo piensa.
El arte conceptual no es un engaño, es simplemente una mierda, TODO una mierda.

Anónimo dijo...

hala, otro moderado...

Anxo Varela dijo...

Mariano, te has pasado... no TODO el arte conceptual es una mierda. También hay tiburones en formol, bolsas de basura -con y sin neones-, neones apilados, piedritas apiladas, carretillas con ladrillos, tablas apiladas, luces de Navidad, maquetas de casitas -con y sin bombillas-, vídeos en "loop", gente que se mea, que echan fuel al mar, gente que folla, o se desnuda porque sí, gente que come, gente que come mierda, gente que come sus vómitos una y otra vez, gente que come fetos humanos, perros a los que atan hasta morir de hambre, más animales en formol, cuadros antiguos que se destruyen en museos, chicas que se hacen pasar por locas, salas vacías...

No se puede decir que TODO el arte conceptual sea una mierda. Lo de la mierda, es cierto, constituye un género importante de por sí dentro del arte conceptual, desde Manzoni a Wim Delvoye, pasando por Chris Ofili y una pléyade de tristes "pintores de mierda". Pero ¿una mierda TODO? No, hay más géneros o temas conceptuales.

mariano dijo...

No tengo porqué ser moderado, anónimo. Si algo es una mierda, lo es y ya está, no hay porqué decir "bueno, sólo es media mierda, un poquito sólo", o "hay que respetar todas las sensibilidades, la mierda puede ser algo maravilloso para algunos".
Igual que hay quien sostiene que la pintura no es arte contemporáneo, yo soy muy libre de pensar y de decir que el arte conceptual, para mí, ni es contemporáneo ni es arte, y que prácticamente todo es basura (puede que un uno por mil sea al menos reciclable en algo útil, como los fluorescentes de Newman que al menos sirven para iluminar).
Tener una opinión formada y justificada (y la mía lo es al menos tanto como la tuya) no es algo que tenga nada que ver con la moderación ni la tolerancia.
Sí lo es impedir que la gente opine, o temer que las opiniones de personas trasciendan a la calle y acaben con pesebres como el de ese tipo de arte al que por lo visto es un grave pecado de fe ofender.
Tranquilo, no será el hartismo quien acabe con estos pesebres, sino la propia crisis. Cuando se acabe la pasta pública incontrolada que se maneja en los chiringuitos "artísticos" y culturales veremos cuantos videoinstaladores y conceptuales quedan...y cuantos pintores.
Acuérdate de esto que te digo dentro de unos meses.

mariano dijo...

tienes razón, Anxo, la mierda sólo es un subgénero del arte "emergente". Cómo pude obviar todos esos ejemplos que mencionas. La moderación me ciega.

Juanma Moreno dijo...

A mi lo que me pasa es que no acabo de emerger del todo.
:)

Fet dijo...

"El conceto es el conceto". O algo.
Fet (bajo la inspiración de Manuel Manquiña).

mariano dijo...

Yo siempre había pensado (volviendo al tema que nos ocupa), que la homeopatía era un TIMAZO.
Tenía un exconcuñado que era visitador médico (ese noble oficio). Un día me explicó el principio de la homeopatía y ante su inalterable convencimiento no sabía si había oído mal, si me estaba tomando el pelo o si el tío realmente era tan idiota para creer lo que estaba diciendo.
Poco después la homeopatía tuvo un boom que hizo que me guardase para mí mis pensamientos ("o sea, una medicina con una infinitésima parte de pricipio activo y muchísimo placebo funciona mejor que una con más pricipio activo...ah, claro").
Cuando, pasado ese boom, comienzan a oirse voces que llaman al asunto por su nombre, T-I-M-O, uno se siente aliviado y se da cuenta de que no es el único ser humano entre las vainas, como en "la invasión de los ladrones de cuerpos".
Supongo que el quik de la cuestión en que alguien se atreva a decir primero: "pero esto es un timo, ¿no?"...
(No sé a que me recuerda esto)...
La moraleja es que es mucho mejor para uno mismo, y para el conjunto de la humanidad, que cuando uno perciba que le están tomando el pelo, DECIRLO.
Aunque siempre habrá un Nacho diciendo "calla, calla, deja las cosas como están"...

Folks dijo...

Malditas risas enlatadas...

Todos los actos de trilería y cancamusa, llámesele homeopatía o arte conceptual son igual de tóxicos.


Por cierto, voy viendo la revista del Hartismo con calma, cuando tengo ratos tontos, y acabo de ver que habéis puesto (y ampliado, cosa que agradezco) el post aquel sobre gastos públicos absurdos.

Me siento halagado ^^